Tener una visibilidad óptima es fundamental en carretera. Confort y, principalmente, seguridad hacen que este sea uno de los elementos más importantes a la hora de prevenir accidentes de noche, pero también de día. Unas buenas luces nos permiten identificar mejor lo que sucede en nuestro entorno, anticiparnos a posibles riesgos.
Sin embargo, las luces halógenas, las que vienen montadas de serie en los coches más antiguos, no ofrecen la mejor de las visiones. Conocedores de esto y una vez que la normativa ya lo permite, los profesionales recomiendan abiertamente sustituir los faros halógenos por bombillas LED, que proporcionan un mayor rendimiento y una visibilidad más clara, más blanca, en la oscuridad. Esto permite un menor cansancio en la vista y un alcance de mayor distancia.
La oportunidad de negocio es clara para el taller, pero también para el bolsillo de sus clientes. Un win-win. Las bombillas LED son más eficientes ya que consumen menos energía. Tienen una vida útil más duradera, de hasta 20.000 horas de funcionamiento.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todas las luces LED pueden instalarse en los vehículos. Solo aquellas que estén homologadas y cumplan con la normativa ECE R37.
De ellas, las que mayores garantías ofrecen son las LED de la gama Night Breaker de Osram, las primeras en recibir autorización en Europa y que son hasta tres veces más brillante que los requisitos legales mínimos establecidos.
Osram cuenta con tres modelos dentro de la gama Night Breaker para ofrecer a los conductores la mejor visibilidad. El H7, el H4 y el W5W, ampliamente contrastados.
Para saber cuál se adapta mejor a cada coche, Osram cuenta con un listado de vehículos en los que se pueden sustituir los faros halógenos por estas bombillas LED.
Una vez instaladas, Osram permite la descarga del Documento General del Tipo Homologación, que facilitará las revisiones tanto en el taller, como en la ITV.
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